«La sombra de Dios es vasta» – decía Frederico Nietzsche, después de anunciar que Dios había muerto. Dios había muerto y, por eso, los seres humanos habían quedado huérfanos, solos en la [...]
«La sombra de Dios es vasta» – decía Frederico Nietzsche, después de anunciar que Dios había muerto. Dios había muerto y, por eso, los seres humanos habían quedado huérfanos, solos en la [...]