Una razón después y todavía

Como si toda la existencia fuera
un papel arrugado en el bolsillo
de atrás de un llanto tibio y amarillo
por los alrededores de una esfera.

Como si alguien los ojos me pidiera
y mis ojos, sin lágrimas ni brillo,
ascuas leves, relámpago y cuchillo,
a tientas con tu tacto y tu quimera.

Otra vez la tristeza como un llanto
acariciando mi piel y sus estambres,
y una oquedad después y todavía.

Y todavía al filo de este canto,
anido en mi existencia sus enjambres
y una razón después y todavía.

Blas Márquez, cmf

Start typing and press Enter to search