No me calma esta sed de libertad
las migajas que caen de tu Mesa
ni el plato de cenizas decorado
con manjares de cobre y lunas secas.
Me vengo a referir…
Rompen las olas
el silencio amarillo de las dunas.
Resbalan las caricias
por el cuerpo abatido de la arena.
La calma de esta tarde
dilata el horizonte y me conmueve.
Frente al mar estoy solo
y a lo lejos, el mar de Galilea
acaricia la barca.
Me pongo a escribir y abro las arterias
de todos mis asombros.
Por las esquinas rotas de mis sueños
ronda la luna.
Y los corales de mis cálculos
navegan cifras y ecuaciones.
Me faltan herramientas
y resisten los cálculos
a este enjambre de números
sin bordes ni azahares.
Las Palmas, 2021
Blas Márquez Bernal, cmf
(FOTO: Erda Estremera)
EU VIM PARA DIZER em portugués
