Esta noche está en vilo. Luna llena.
Los sueños se enternecen. Pan bendito.
El mar despierto en su incansable rito
de amor entre las olas y la arena.
En vilo la razón en esta escena
diaria de la vida. Lo repito
como un slogan recreando el mito
de un Sísifo desnudo que da pena.
En vilo el corazón. La magia, poca.
La vida toda en vilo permanente.
Y con la roca al hombro ascendemos.
No hay un bar donde llenar la copa
y bajamos ligero la pendiente.
El mar está ¿y no hay barca ni remos?
Las Palmas, 31 enero, 2022
Blas Márquez Bernal, cmf
(FOTO: NEOM)
EM SUSPENSO em portugués