DOMINGO XVIII DEL TIEMPO ORDINARIO (Lc 12, 13-21)
Para un cristiano no debe ser su meta el “almacenar, acumular, guardar”. Sí el compartir, sí el buscar otra vida que nos lleve a DIOS. Ello nos conducirá a tratar de implementar en nuestra
vida la frase de Jesús en el Evangelio “la vida no depende de las riquezas”. La insensatez del rico del Evangelio de hoy debe ser el referente de lo que no debemos tener como ideal en nuestro día a día.
Por otro lado, no nos pasa por alto que el pasaje del Evangelio de hoy comienza con una disputa entre hermanos por temas de herencia… Qué triste cuando esa tentación de acumular, guardar, acaparar, se da en el seno de nuestras familias.
Propuesta para cuidar la familia esta semana:
Desde una actitud de agradecimiento a Dios por todos los bienes que nos ha dado, tanto espirituales como materiales, pidamos al Señor que nos ayude a vivir en nuestro día a día con
este criterio de compartir, y no con el de acumular insensatamente, y que este modo de vida sea ejemplo para toda nuestra familia y amigos. Quizá este tiempo de verano, donde se prodiga el ocio, el gasto vacacional… sea una buena ocasión para, entre todos, tomar una decisión concreta sobre algo a compartir con alguna persona o colectivo necesitado.
Pilar López y Joaquín Devolx