COMO SI ALGUIEN LOS OJOS ME PIDIERA

Como si toda la existencia fuera

un papel arrugado en el bolsillo

de atrás de un llanto tibio y amarillo

por los alrededores de una esfera.

 

Como si alguien los ojos me pidiera

y mis ojos, sin lágrimas ni brillo,

ascuas leves, relámpago y cuchillo

a tientas con su tacto y su quimera.

 

Otra vez la tristeza como un llanto

golpeando mi piel y sus estambres,

y una oquedad después y todavía.

 

Y todavía al filo de este canto,

anido en mi existencia sus enjambres

y una razón después y todavía.

 

Sevilla, 1979

Blas Márquez Bernal, cmf

(FOTO: Victor Freitas)

 

COMO SE OLHOS DE ALGUÉM ME ESTIVESSEM A PEDIR em portugués

 

Start typing and press Enter to search