Balance migratorio 2022

El Balance Migratorio del año 2022 viene marcado por uno de los sucesos más crueles acaecidos en nuestras fronteras. La masacre del paso fronterizo del Barrio Chino, entre Melilla y Nador, nos muestra las claves de una política migratoria cruel, inhumana y basada en acuerdos ignominiosos entre España y Marruecos para el control migratorio. En la práctica, eso significa subcontratar a Marruecos para impedir, cueste lo que cueste, que las personas del África occidental puedan entrar en España, incluso, cuando como en el caso de Melilla, proceden de países en conflicto bélico, como Sudán.

Estos acuerdos son la causa del descenso de la llegada de personas a España durante este año 2022, en comparación con años anteriores. Sin embargo, mientras se reduce el número de personas que logran alcanzar costas españolas, en 2022 se ha alcanzado, desde que la APDHA (Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía) hace su seguimiento anual, la segunda cifra más alta de personas muertas y desaparecidas cuando intentaban llegar a nuestro país.

Al menos 1.901 personas han perdido la vida en los trayectos migratorios hacia España en 2022, mientras que 34.537 lograron llegar con vida. Este incremento de la ratio de personas muertas o desaparecidas se explica, de nuevo, por los acuerdos con Marruecos que dirigen los flujos migratorios hacia las rutas más largas y más complejas, aquellas que provocan la muerte de más personas.

Otro ejemplo más del precio que pagamos como sociedad, tanto en lo humano como en lo económico, por unas políticas migratorias crueles y restrictivas. Unas políticas que han adoptado como dogma el cierre de fronteras, las vallas cada vez más altas, las rutas cada vez más peligrosas. Frente a este dogma, se deben plantear alternativas que conduzcan hacia la implementación de vías legales y seguras, a la eliminación de estas prácticas racistas de pretendida impermeabilización de las fronteras (en una dirección y únicamente para los seres humanos, por supuesto), a la introducción de mecanismos que faciliten la migración y, por supuesto, a la exigencia del respeto de los derechos humanos en los países de tránsito y origen. Las fronteras no deben ser un espacio donde quedan en suspenso los derechos humanos. La gestión de las fronteras debe hacerse desde el respeto escrupuloso de los mismos.

 

Ana María Rosado y Rafael Lara, del área de migraciones de APDHA

Pincha aquí para acceder al Informe Derechos Humanos en la Frontera Sur 2023

 

Start typing and press Enter to search