Es estremecedor leer o ver las noticias sobre nuestra clase política: cada día un nuevo escándalo, cada día un nuevo «y tú más», cada día una nueva justificación o un nuevo escarnio en los medios, que son quienes muchas veces nos hacen juzgar y condenar.
Y ante todo esto me resuena con fuerza una palabra de Jesús:
«El que es fiel en lo poco, también en lo mucho es fiel; el que es injusto en lo poco, también en lo mucho es injusto.» (Lc 16,10)
Y una pregunta que me brota y te comparto: «¿cómo soy yo de fiel?»
Y según me la repito, la indignación, el juicio y la condena van dejando paso a un deseo y una petición: «Hazme, Señor, el ser cada día más fiel a ti en el servicio a mi prójimo.»
Es Pascua, Jesús permanece fiel ofreciéndonos la Vida. Que con su Santo Espíritu crezcamos en la fidelidad que nos haga falta.