LECTURA (DOMINGO XVI DEL T. O.)
Lucas 10, 25-37:
En aquel tiempo, entró Jesús en una aldea, y una mujer llamada Marta lo recibió en su casa. Ésta tenía una hermana llamada María, que, sentada a los pies del Señor, escuchaba su palabra. Y Marta se multiplicaba para dar abasto con el servicio; hasta que se paró y dijo:
- «Señor, ¿no te importa que mi hermana me haya dejado sola con el servicio? Dile que me eche una mano.»
Pero el Señor le contestó:
- «Marta, Marta, andas inquieta y nerviosa con tantas cosas; sólo una es necesaria. María ha escogido la parte mejor, y no se la quitarán.»
REFLEXIÓN
*Nada en contra de los que se dedican a la preparación del culto, a cuidar los detalles de la liturgia, a mantener el templo limpio, adornado, ambientado. ¡Alguien lo tiene que hacer!
Sin embargo, es bueno saber priorizar.
«María escogió la mejor parte: Sentada junto a Jesús, escuchaba su palabra».
¿Cómo no se iba a quejar Marta?
PROPUESTA PARA CUIDAR LA FAMILIA
* Sentado en nuestra mesa de trabajo, aislado de ruidos y motivos para la distracción, dediquemos tiempo para escuchar a Jesús.
* Seguro que esa oración silenciosa, semi contemplativa, va a derivar en una praxis eficaz y fructífera.
* Pongamos en común (en FAMILIA) las conclusiones de esta experiencia
Manolo Devolx